Como hemos visto, el funcionamiento de los equipos de presión se basa en el hecho de que en ciertos momentos nuestra instalación puede necesitar más presión que la existente directamente en la red. Parece lógico que, para realizar un aprovechamiento racional de la energía utilizada por dichos equipos y alargar la vida de los mismos, se deba disponer en nuestra instalación de un sistema que aproveche la presión de la red de distribución en aquellos momentos en que ésta sea suficiente para abastecer nuestra instalación. El dispositivo utilizado para ello es el by-pass.

Fundamentalmente, el by-pass consiste en una tubería que conecta directamente la entrada de agua al grupo de presión con la salida del mismo. De esta forma, cuando la presión de la red sea suficiente, el agua penetrará en nuestra instalación a través de dicha tubería, mientras que en el momento en que dicha presión sea menor que la necesaria, el equipo de sobreelevación actuará inmediatamente (figura).

Habitualmente, el by-pass se encuentra dotado de una válvula de corte, con objeto de poder realizar el corte de agua a la instalación, y una válvula de retención, con objeto de evitar que el agua de salida del depósito de presión pueda retornar aguas abajo de nuestra instalación, bien a la red de distribución, bien el depósito de acumulación. El hecho de instalar un by-pass obliga también a la instalación, en la tubería de salida del depósito de presión, de una válvula de retención, que evite la entrada de agua en éste desde la tubería de salida.

El by-pass puede tener otra utilidad, quizás menos conocida, pero tan importante como la anteriormente reseñada, y es el uso del mismo como dispositivo de renovación. Siempre que las condiciones de presión y caudal en la acometida sean suficientes para dar servicio a la instalación, y al instalarse el by-pass, lógicamente el grupo de sobreelevación no entrará nunca en servicio, con lo cual el agua acumulada en los distintos elementos del grupo se estancaría, dejando de ser apta para el consumo. Con el fin de evitar lo anteriormente expuesto, es necesario dotar a la instalación de una electroválvula que se comandará a través del by-pass, obligando a funcionar al equipo de bombeo, permitiendo la renovación del agua. Este tipo de instalación recibe habitualmente el nombre de by-pass automático.

Reseñamos aquí el hecho de que en ciertos puntos de nustra geografía, las Delegaciones del Ministerio de Industria y Energía pueden obligar al montaje en todo momento de un dispositivo tipo by-pass en aquellas instalaciones dotadas de grupo de sobreelevación.