Todos
los métodos de arranque que vamos a analizar en este apartado reducen la tensión
de alimentación pero no modifican la frecuencia. Como consecuencia, el cociente
entre el par y la corriente es reducido.
1)
Estrella-triángulo:
Este
método puede ser utilizado para motores con bobinados 400Vac. En funcionamiento
normal, los devanados están conectados en triángulo, pero en los primeros
instantes del arranque se conectan en estrella. Esto reduce la tensión en
bornes de los devanados al 57%, y el par de arranque al 33%. Este método tiene
la ventaja de mantener constante el cociente entre el par del motor y la
corriente.
Este
método requiere dos contactores, y un relé retardado si el arranque es automático.
Durante la transición de estrella a triángulo, el motor está desconectado
durante unos instantes, lo que produce una pérdida momentánea del par y un
pico de corriente en la reconexión (figura 2.5).
Figura 2.5: Características del arranque
estrella-triángulo
2)
Autotransformador:
Un
arranque por autotransformador se realiza mediante un autotransformador con
varias salidas. Al principio, el motor se conecta a la salida de menor tensión,
conmutando a continuación a salidas de voltaje superior a medida que la
velocidad se incrementa hasta llegar a la tensión nominal. Normalmente se
realizan dos o tres etapas. Cada etapa requiere un contactor, que necesita ser
controlado mediante un relé retardado en el caso de un arranque automático.
Este método desconecta momentáneamente el motor en cada salto, lo que provoca
picos de corriente y pérdidas transitorias de par. Una ventaja de este método
es el reducido valor de la corriente debido al efecto transformador.
3)
Resistencias estatóricas:
Este
método intercala resistencias en serie con la alimentación durante el
arranque. A medida que el motor aumenta la velocidad, se disminuye el valor de
las resistencias y finalmente se cortocircuitan. Un arrancador de este tipo de
uso muy extendido utiliza resistencias líquidas, constituidas por láminas
conductoras introducidas en recipientes de carbonato sódico como elementos
resistivos. Este método no proporciona muy buenos resultados en lo que se
refiere al control de la tensión en los terminales del motor, y es bastante
ineficiente debido a las elevadas pérdidas en las resistencias durante el
arranque.
4.)
Arrancadores electrónicos:
En
su forma más extendida, un arrancador electrónico está constituido por tres
pares de tiristores en antiparalelo intercalados entre la línea y el motor.
Mediante el control del disparo de los tiristores puede ser reducida la tensión
aplicada al motor.
Información facilitada por el departamento técnico de: